La duodécima edición del White Summer, que se celebró en Palamós, concluyó ayer, 15 de agosto, con una Holi Party. Esta fiesta llena de color al ritmo de los éxitos del verano ha recuperado la tradición de cerrar el festival de la mejor forma.
Esta edición del White Summer, que ha durado once días en lugar de los doce programados a consecuencia de la cancelación de la jornada del pasado miércoles 14 de agosto por condiciones meteorológicas adversas, ha ofrecido una experiencia de diseño, artesanía, creatividad, gastronomía , entretenimiento y música en directo para todos los públicos, atrayendo una afluencia total de 29.230 visitantes y posicionándose como evento familiar de referencia en la Costa Brava.
La directora general del Grupo Clipper’s, empresa promotora del White Summer, Vanessa Llopart, ha expresado que “Cada edición busca superar la anterior y seguiremos en este proceso de mejora continua. Hemos ampliado nuestros contenidos creando una oferta más completa para las familias .White White Summer se sigue consolidando como un referente no sólo por su oferta de ocio, cultural y gastronómica, sino también por su capacidad de crear recuerdos para toda la familia”. Además, Llopart ha añadido: «Agradecemos profundamente a todas las marcas, diseñadores y restauradores que han confiado en nosotros una vez más, así como a los asistentes, colaboradores, patrocinadores y equipos que han hecho posible esta edición del White Summer. Ya estamos trabajando con entusiasmo en la próxima edición, con el firme compromiso de seguir mejorando, innovando y sorprendiendo a nuestros visitantes en 2025».
La edición de 2024 del White Summer ha reunido a más de 70 marcas y diseñadores independientes, que a lo largo del festival han mostrado sus creaciones en un mercado que ha destacado por su diversidad y calidad.
El Happy Market, organizado por La Xarranca, también ha sido un éxito entre los más pequeños, que han gozado de un espacio dedicado especialmente para ellos. Las actividades infantiles, que han incluido desde hinchables y pintacaras hasta la novedad del escenario Magic Bindi con peluquería creativa y maquillaje artístico, han garantizado que los niños se lleven grandes recuerdos del verano.
Además del mercado y las actividades infantiles, los asistentes a la duodécima edición del White Summer han podido disfrutar de tres actuaciones diarias de circo y artes escénicas, con pasacalles que han recorrido el recinto, acrobacias aéreas y espectáculos de luces, así como otras actividades de ocio como un toro mecánico o un futbolín gigante, entre otros.
La programación artística de esta edición ha disfrutado actuaciones de artistas de renombre como Vicco, Julieta o 31 FAM, espectáculos familiares como el del Mag Lari y tributos que han revivido los logros de grupos icónicos como La Oreja de Van Gogh.
Además, el White Summer ha vuelto a convertirse en esta duodécima edición en el mayor restaurante al aire libre de la Costa Brava, ofreciendo una variada selección de opciones culinarias que han deleitado a todos los paladares. La oferta gastronómica ha sido tan diversa como inclusiva, asegurando que todos los visitantes pudieran gozar de una experiencia culinaria excepcional.
La duodécima edición del White Summer concluye reafirmándose como una cita imprescindible del verano en la Costa Brava. La magia del White Summer todavía está viva, y ya empieza a soñarse con lo que llevará la siguiente edición en el 2025.